Mientras hago más Cake Pops (tranquilidad, todo llegará), os voy a enseñar otra de mis aficiones. Con lo que a mi me gusta trabajar con las manos, tenía que lanzarme a la costura!!!. Cuando tuve a mi hija Inés, le hice un montón de vestiditos: con nido de abeja, con tablas, con volantes...con una niña es muy divertido. Pero con un niño es más difícil!!!. Aún así, como no me puedo estar quieta, decidí ponerme a ello. Compré en Casa & Jardín una tela de tapicería que liquidaban tirada de precio, una tela de algodón de rayas para el interior, y forro polar para que abrigara. Unos botones grandes y un poco de paciencia...había que cortar las tres telas, y yo no uso máquina de coser...todo lo coso a mano. Pero después de mil pruebas y retoques..et voilá, un abrigo para mi ratón!!. Lo malo es que hay que limpiarlo en la tintorería, pero le queda muy mono...parece un vagabundillo, con esa cara de pillo que tiene. Con permiso de las que de verdad sabéis de esto, quiero compartir mi creación. Y, ¿qué me decís del propietario del abrigo?.¡¡¡¿¿¿ No es para comérselo???!!!
Por cierto, el ratón se llama Fernando, como Papá...
